El seguro responsabilidad civil aparejador se engloba en los llamados seguros de responsabilidad civil profesional, puesto que para su ejercicio es imprescindible una titulación oficial.
Tiene por objeto cubrir las reclamaciones por daños, reales o presuntos de tipo patrimonial a terceros.
Para un aparejador autónomo sin trabajadores, lo esencial es la garantía de responsabilidad civil profesional, que debería abarcar vía retroactividad desde los inicios de la actividad (mínimo 10 años), pues las reclamaciones se puede producir bastante diferidas en el tiempo.